
Los Coollogger son registradores electrónicos de temperatura que solucionan la gestión eficiente de la cadena de frío. Con el uso de las aplicaciones Coollogger (Apps, Programa PC) se suben los datos registrados automáticamente a la solución web (nube), facilitando su lectura y posterior toma de decisiones. Los datos de cada dispositivo se pueden asignar a diferentes campos de usuario (tipo de transporte, carga, país, operador, origen, destino,) permitiendo compartir, comparar, analizar, y gestionar la información.
Hablamos con Iñigo Alonso Echevarria, Fundador de Coolloger.
¿Cómo se os ocurrió la idea? ¿Teníais relación con el sector?
Tenemos otra empresa, Ozeano, que está muy introducida en el transporte internacional de fruta. En este sector es imprescindible gestionar la cadena de frío, y escuchando a nuestros clientes vimos que podíamos aportar algo novedoso. Y así surgió Coollogger, como un sistema para monitorizar más eficientemente la temperatura.
¿Cómo empezasteis? ¿Fabricasteis el aparato y luego buscasteis clientes o al revés?
Arrancamos en 2015, pensando efectivamente que teníamos ya un acceso al mercado. Luego no ha sido tan sencillo. Creo que esto ocurre el 99% de las veces que lanzas una idea…
¿Cuáles fueron los principales problemas al principio? ¿financieros?
Lo más complicado ha sido el buscar una relación entre las prestaciones del sistema y el coste. Hoy en día se pueden hacer maravillas a nivel técnico, pero hay que estar seguro de que el mercado las va a pagar.
¿Y los problemas ahora?
Ahora sí nos preocupa más la financiación, estamos invirtiendo todos los años en nuevos desarrollos y a la vez viajando mucho para abrir nuevos mercados. Estamos haciendo un gran esfuerzo para ampliar la red comercial y eso es caro, y no da un resultado inmediato
¿Quiénes son vuestros clientes? ¿Dónde están?
Nuestros clientes son muy variopintos, desde grandes multinacionales con complejos sistemas logísticos de frío, hasta una farmacia de barrio que quiere tener una forma ágil para controlar que sus medicamentos están bien conservados. La inmensa mayoría de nuestras ventas hoy por hoy son exportaciones, más de un 90%
¿El producto se compra una vez y ya está o dura mucho?
Tenemos varios modelos, uno es de un sólo uso pensado para viajes transoceánicos en los que es muy difícil recuperar los dispositivos, y otros reutilizables que duran hasta dos años.
¿Hay que actualizar software u ofrecéis uno nuevo recomprándoles el viejo?
Nuestro sistema incluye una plataforma cloud, Apps para Android e iOS y los dispositivos en sí. Continuamente lanzamos mejoras en forma de actualizaciones gratuitas.
¿El producto es el mismo que cuando empezasteis o ha evolucionado?
Ha cambiado muchísimo. Del primer modelo hasta el último que hemos lanzado este año, hay un mundo. Cada uno es para un tipo de uso diferente, pero todos con una excelente calidad. Y es imposible parar de sacar cosas nuevas porque estamos en un mercado muy dinámico.
¿Tenéis competencia? ¿Dónde?
Hay muchísima competencia, por todo el mundo; en China, India, Turquía, hay abundantes competidores en precio, pero en sectores como farmacia, salud e incluso alimentación las empresas empiezan a buscar soluciones más fiables, sofisticadas y que aporten más valor añadido que el mero control de temperatura. Ahí podemos jugar nuestras cartas.
¿Los Coollogers son “made in” Bizkaia?, ¿es una apuesta por el territorio?
Sí, tanto el diseño como la fabricación la hacemos aquí. Está ligado a lo que comentaba sobre la calidad y la fiabilidad. En muchos países el marcado CE vende mucho porque presupone calidad y autocontrol, y nosotros hemos apostado por este modelo. Seguro que podríamos ser más baratos, pero la calidad que tenemos aquí no es fácil de conseguir en otros países.
¿El Coolloger mide la temperatura? ¿hace también más cosas?
La temperatura es el parámetro básico. Ahora también ofrecemos en el último modelo, que se lee por Bluetooth, un sensor de luz , y damos la posición GPS del momento de la lectura. En este último trimestre incorporaremos un sensor de humedad y una sonda externa.
¿Cómo os diferenciáis de la competencia?
Básicamente, escuchando a los clientes. En general las empresas más grandes ofrecen soluciones estándar para todo el mundo, y nosotros somos capaces de dar soluciones más flexibles y, muchas veces, a medida. Y hemos tratado de proteger estas ideas, confiemos en que la patente europea que hemos solicitado sea autorizada.
¿Cómo os dais a conocer? ¿Ferias, webs,…?
Viajamos mucho en busca de distribuidores. Este año hemos estado en Sudáfrica, Emiratos, Arabia Saudí, Costa Rica, Ecuador, Singapur, Filipinas, Vietnam… por no mencionar Europa. Y también hemos o vamos a exponer en ferias especializadas (Gourmet o Fruit Atraction en Madrid, Fruit Logistica en Berlín…). El posicionamiento online también es muy importante.
¿Tenéis más líneas de negocio relacionadas?
Como te comentaba, tenemos otra empresa que fabrica filtros de etileno, que se utilizan para alargar la vida útil de determinadas frutas como el plátano, el kiwi, el aguacate…
¿Con qué desayuno empieza el día un emprendedor?
En mi caso, poca cosa, café negro.
¿Qué nos encontraríamos en tu mesa de trabajo?
Muchas tarjetas de visita, monedas de muchos páises y en general bastante desorden…
¿Café o té?
Café, café. Sólo y al estilo americano a ser posible